NOTA: Este artículo que compartimos aquí -escrito originalmente por un miembro del Triángulo Cierzo para masoneria.es– arroja luz sobre la organización de «la masonería» en España.
Las mas de las veces, lo que se dice y escribe sobre «la» masonería se parece poco a la realidad del día a día. Esto ocurre fundamentalmente porque hablamos de masonería como una unidad de destino en lo universal, cuando en realidad la unidad de la masonería simplemente no existe.
Las similitudes entre las masonerías practicadas en España
Aunque para el profano pueda resultar asombroso, las similitudes entre unas organizaciones masónicas y otras es la existencia de rituales, símbolos y cierto paralelismo en los discursos, propiciado por la tríada libertad-igualdad-fraternidad, que con mayor o menor profusión todas ellas dicen defender. No obstante, ese paralelismo en los discursos suele ser tan ambiguo que cuando se investiga un poco y dicha ambigüedad empieza a esclarecerse nos damos cuenta que están en las antípodas unos de otros.
Sirva como muestra un ejemplo basado en los partidos políticos, que como los tenemos en las noticias todos los días, nos sirve como concepto bien traído y comprendido por todos quienes no son masones. En España, existe un partido político que se define a sí mismo como “un partido político para la renovación y el fortalecimiento de la vida democrática española”; por su parte, otro partido lo hace como “basado en los principios de justicia, igualdad, solidaridad y respeto por la naturaleza y organizado conforme un Estado social y democrático de derecho”.
Para un ciudadano medio, que lee la prensa o sigue las noticias en los medios, será una trabajo titánico identificar la ideología de cada uno de ellos, e incluso se sorprenderá al comprobar que estas autodefiniciones pertenecen a dos partidos situados en los extremos derecho e izquirdo del espectro político; aún conociendo este dato, sigue resultando verdaderamente complejo reconocer cual de los dos ejemplos anteriores corresponde al partido más a la derecha del espectro y cual al de más a la izquierda. A modo de curiosidad, mencionamos que los ejemplos pertenecen a «Vox» y «PCE» y dejamos el juego de identificar cada mensaje con su emisor al lector.
Podríamos dar mas ejemplos, pero es suficiente. A estos dos partidos les unen una declaración de principios ambigua, una organización jerárquica y un objetivo común: expandir sus ideas por que ambos creen que son las mejores. Lo mismo pasa en la masonería: las organizaciones nos parecemos en la estructura, el marco ritual (que a su vez es altamente variable) y el objetivo común de la mejora personal y de la sociedad. A partir de esto no nos parecemos en nada; y en nada, es en nada.
Debemos reconocer que la mayoría de mensajes públicos de la masonería engañan -sin mala intención- al publico objetivo. Posiblemente los periodistas que replican los mensajes mezclan -también sin mala intención- churras con merinas, y al final, las personas que pudieran tener un mínimo interés en nuestro trabajo se espantan ante tanta confusión.
Precisamente con aportar algo de luz acerca las prioridades, preocupaciones y sensibilidades que se encuentran al amparo de las entidades masónicas presentes en terriorio español hemos elaborado este cuadro , basado, a su vez, en un estudio de campo/encuesta en el que han participado de forma anónima y voluntaria masones de las cuatro principales organizaciones masónicas españolas en cuanto a implantación se refiere.
Somos conscientes de las críticas que podemos recibir desde otras entidades masónicas, pero consideramos muy interesante y clarificador este ejercicio de interpretación de las grandes diferencias entre una organización masónica y otra.